TERRITORIOS


Los procesos de construcción de una identidad nacional, así como los cambios en las prácticas y modelos de enseñanza de las artes plásticas, tuvieron un papel de particular relevancia en el desarrollo del paisaje tanto en México como en Japón. Ello derivado de las profundas transformaciones sufridas por ambos países a finales del siglo XIX y principios del XX, que resultaron en su conformación como naciones modernas.

Los diversos territorios marcaron el tipo de creaciones realizadas; las escuelas nacionales, los centros regionales, los tradicionales, así como las prácticas alternativas e independientes dieron pie a variedad de estilos y creaciones.

Las escuelas oficiales -en México la Academia de San Carlos (después Escuela Nacional de Artes Plásticas), y en Japón la Escuela de Bellas Artes de Tokio y la Escuela de Pintura de la Prefectura de Kioto- constituyeron enclaves donde profesores y estudiantes exploraron soluciones estéticas, y a la vez, fueron espacios de participación para la construcción del ensamblaje simbólico de “lo nacional”, que deviene parte importante de los contenidos de corrientes pictóricas de esos años en ambos países.

CENTROS REGIONALES, TRADICIONALES Y PRÁCTICAS INDEPENDIENTES




Angelina Beloff (1879-1969) | Paisaje natural , 1949 | Óleo sobre tela | Colección Kaluz


Otros enclaves y actores desplegaron un trabajo de extrema importancia en la enseñanza y producción de la pintura de paisaje tanto en México como en Japón. La actividad plástica que se realizó en lugares como Guadalajara, Kioto, Zacatecas, Fukuoka, Coahuila o Hiroshima, más allá de los vínculos con las escuelas oficiales que mantuvieron algunos de los pintores, fue fundamental tanto en la definición del paisaje moderno como en su desarrollo.

Los talleres tradicionales de enseñanza, como el de Félix Bernardelli o el de Tsuji Kakō 都路華香 (en donde estudió Tomita Keisen 冨田溪仙, pintor que se exhibe en esta sección), contribuyeron a la formación de artistas relevantes que ejercieron un papel en la transformación de la pintura de paisaje.

Además de los talleres, se configuraron grupos y asociaciones que aglutinaron a pintores a partir de intereses comunes y que estimularon espacios de exhibición alternativos a los oficiales.

Se exhiben aquí obras de Angelina Beloff, Arturo Souto, Juan O’Gorman, Ogawa Sen’yō 小川千甕, Kusunoki Keishū 楠瓊州 y Kai Kozan 甲斐虎山, que encarnan trayectorias independientes. Hemos incluido asimismo a pintores monjes como Baichi Dōjin 梅痴道人, Yokoi Kinkoku 横井金谷, y Hirano Gogaku 平野五岳, y a artistas del exilio español en México, como Arturo Souto, que se mantuvieron distanciados de la centralidad marcada por las escuelas principales.



Yokoi Kinkoku (1761-1832) | [Paisaje], c. 1810s | Tinta y color sobre papel | Colección Terry Welch